A la señora de los pasillos Criatura inconveniente como pocas, un cetáceo no es la clase de pez que uno tendría en la pecera. Un teriólogo ofendido objetaría ahora que la ballena no es un pez, y la discusión se tornaría más álgida al entrar en el tema odontológico. Sin embargo, parecería cuestión de embarcarse en el acomodaticio oleaje de la metáfora, para descubrir que tal vez ni siquiera se trate de una criatura. Se destaca, eso sí, su tamaño y por ende su relativa importancia. En cuanto a su capacidad oniromántica, queda totalmente refutada y fuera del temario: el lenguaje es una máscara cóncava. Soñé (escuchar) Jesusa Rodriguez / Liliana Felipe (2002) Soñé que se me caían los dientes soñé que mis dientes enormes como submarinos se iban al fondo del mar. Soñé que los peces que duermen aquí entre mis dientes soñaban que eran mis dientes y que se caían y siempre soñando soñé que entre sueños soñaba que se me caían los sueños soñé. Ustedes comprenden soy una ballena q...
Juan Pablo Cozzi, insistiendo en el bloguismo desde 2009. ¡Ahora en colores y con ilustraciones!