Afirmar que todo movimiento es una ilusión no es menos acertado que decir que lo único ilusorio es la estática. Te veo bailar al ritmo lánguido de la expansión del cosmos y todo me sugiere artificialidad. Incluso la neurona ligada a este ojo que te ve procura enderezar tu imagen subvertida. Sin embargo, si hay algo cierto (¿lo habrá?) es la mirada. Es ella la que reúne todos los fotogramas en una sola versión de vos bailando, y es todo lo que quiero creer. El movimiento será, tal vez, ese pacto silencioso entre la mirada y todas las otras dimensiones.
Juan Pablo Cozzi, insistiendo en el bloguismo desde 2009. ¡Ahora en colores y con ilustraciones!